Este poema se lo dedica mi amiga Milagros Mendoza Zamora a:
sus cuatro hijos en el Cielo
sus dos hijos en la Tierra
su amado esposo Edgardo
y a todos los bebés no nacidos.
Hijitos de mi vientre
espérenme allá
quiero abrazarles
besarles hablarles
Hijitos de mi vida
quiero contarles de mí
de cómo les pensé desde niña
de lo que hubiéramos hecho juntos
Hijitos de mis sueños
frutos de mi savia
quiero presentarles a mi Amor
el papá que nunca vieron
Hijitos de mi ser
quiero que sepan
que tienen 2 hermanos
Marco Vinicio y César Augusto
Hijitos sin mundo
quiero que me enseñen
a morir a mí misma
y a vivir para el Cielo
Hijitos no nacidos
más vivos que muchos
protejan a los que luchan
por respirar y ver la luz
Hijitos del Paraíso
reciban a todos los niños
que les impiden nacer
y mueren 'dentro'
Hijitos de mi Dios
cuiden de sus padres y hermanos
y siembren en los vientres
una nueva Humanidad
¡Amén!
3 comentarios:
La vida es sagrada,es un regalo de Dios,es la muestra de confianza que Él pone en nosotros,es una responsabilidad que siempre podremos afrontar con Su ayuda.
Precioso poema,lleno de amor,nostalgia y esperanza.
Excelente,Milagros.
Gracias Náyade por este bello regalo.
Amiga Náyade, una vez más nos has regalado tus sentimintos a traves de tus letras. Un corazon tan grande como el tuyo, solo pude repartir amor.
Un abrazo.
Jecego.
¡Muchas Gracias por tu comentario tan hermoso ...y gracias de nuevo a Náyade por su generosidad...!
Milagros M. de Zamora.
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