
Porque fuiste el antídoto preciado
de mi vida errabunda, cuando incierta
en su pena arrastraba su calvario...
Mujer, Eterno Amor, bendita seas!
Bendita si tus manos no mintieron
cuando en mí con dulzura se posaron
y el llanto amargo de tu tierno pecho
halló santo reposo entre mis manos.
Bendita si tu boca contemplando
mi herida, murmuró: “¡Dios no lo quiera!...”
Bendita si ella fue quien sin reparo
besó alocada mis pupilas yertas.
Benditos tus cabellos si rozaron
como gasa mi frente adormecida.
Benditos ¡oh! tus pies... el suave encanto
de su marcha en las horas de vigilia.
Bendita tú, Ideal, Mujer sublime,
Hija Unigénita del Ignoto Sabio
que sabes acallar al ser que gime
con sólo una sonrisa de tus labios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario